Representantes del gobierno interino de Venezuela negaron la venta del edificio sede del Consulado en Nueva York.
«Es absolutamente falso», aseguró al diario ABC de España Gustavo Marcano, ministro consejero de la embajada de Venezuela en EEUU. «Ni hemos tenido aproximaciones o contactos, ni es nuestra intención vender ningún bien de la República», agregó.
El edificio del consulado de Venezuela en Nueva York está en una de las zonas más demandas de la ciudad: en la calle 51, a un paso de la Quinta Avenida, en un lateral de la catedral de San Patricio y en las inmediaciones de algunas de las grandes atracciones neoyorquinas: Rockefeller Center, MoMA, la estación Grand Central, la sede de Naciones Unidas o Central Park.
El inmueble es un caramelo para los desarrolladores inmobiliarios y en el pasado el régimen de Nicolás Maduro buscó venderlo.
En 2017, el Gobierno chavista puso a la venta el edificio, que apareció en una de las principales plataformas inmobiliarias de EEUU, Streeteasy.
Ahora, la posibilidad de que Maduro se hubiera desprendido de ese activo propiedad de Venezuela se ha vuelto a poner de manifiesto en un artículo de The New York Post, que asegura que el inmueble formará parte de un rascacielos del desarrollador inmobiliario Macklowe Properties.
El proyecto, llamado Tower Fifth, supone la demolición de varios edificios pequeños, incluido el consulado venezolano, tanto en la calle 51 como los contiguos que dan a la calle 52, para levantar una torre que, según los planes iniciales, tendría 96 pisos y sería la tercera más alta de la ciudad.
El diario neoyorquino incluye una declaración del dueño de la inmobiliaria, Harry Macklowe, que asegura que la operación «está hecha».
El inmueble está bajo control del Gobierno de Guaidó desde el pasado abril, cuando se tomó posesión del mismo, en coordinación con las autoridades estadounidenses. Desde entonces ha estado cerrado al público, sin ofrecer servicios consulares.